viernes, 18 de enero de 2013

EL BLANCO DEL OJO (1987)

Escrito por JAVIER CASTELLANOS


FICHA TÉCNICA
Título Original: White of the eye
Akas: Bielmo (Polonia)
Das Auge des Killers (Alemania)
L'occhio del terrore (Italia)
L'oeil du tueur (Francia)
O Maníaco do Olho Branco (Brasil)
Tappajan silmin (Finlandia)
To lefko tou matiou (Grecia)
Año: 1987
País: UK
Director: Donald Cammell
Reparto: David Keith (Paul White)
Cathy Moriarty (Joan White)
Alan Rosenberg (Mike Desantos)
Art Evans (Detective Charles Mendoza)
Michael Greene (Phil Ross)
Danielle Smith (Danielle White)
Alberta Watson (Ann Mason)
William G. Schilling (Harold Gideon)
Trailer: Pinchar aquí
Ediciones Españolas en Vídeo: Izaro-Cannon
Punk-tuación: 6/10


SINOPSIS
Condado de Arizona. Unos terribles crímenes azotan a la comunidad de mujeres de alto nivel social. Todas las sospechan recaen en Paul marido de Joan y ejemplar padre de familia. Cuando se acercan dos detectives para cubrir los asesinatos; la inseguridad y el miedo se ciernen sobre Joan pensado si su marido es quien cree que es o en realidad un maldito psicópata.


DATOS Y CURIOSIDADES
El caso del escocés Donald Cammell es realmente curioso y particular dentro de la industria cinematográfica. El realizador ha tocado muy dispares temas dentro del cine, si bien, su primera incursión en el celuloide fue junto a su amigo y tocayo Nicholas Roeg (en la imprescindible  y devastadora “Performance”-1970). Siete años más tarde realizo el clásico “Engendro mecánico” (1977) y seguidamente se puso a las ordenes del grupo “U-2” para grabarles, video-clips o documentales. Como podemos observar y con solo siete títulos en su haber (incluyendo los trabajos para la banda lidera por Bono: U2) Donald Cammell se ha forjado la etiqueta de director maldito y porque no decirlo, otra víctima más de la industria cinematográfica de las Américas.

En lo que refiere al entramado de la cinta, la misma está cargada de momentos violentos de una maravillosa calidad, realmente abrumadora, en especial el segundo asesinato, puro crimen giallesco al estilo Argento: mujer maniatada en la bañera sin poder moverse ni salir a flote, mientras el asesino le muestra un espejo en el que se ve agonizando. El asesino confunde muerte con obras de arte, no damos cuenta de ello en la primera secuencia, cuando llegan los dos miembros de la policía se sorprenden al ver como la habitación donde se ha producido el crimen (concretamente la cocina) queda adornada con símbolos raros y extraños que inquietan a los citados agentes.

                                                          
Artísticamente la producción da sabor añejo a producto televisivo, es cierto que si no es porque la cinta arranca con un brutal y macabro asesinato, más de uno (entre los cuales me encuentro) la quitaría de su reproductor y perdería su tiempo en otra cosa. Pero basta con ver el inicio, tan perturbador y salvaje que la peli te agarra hacia los instintos de Paul: un supuesto y ejemplar trabajador que cuando se le cruzan los cables prepara una escabechina. Solo el azar o el destino hacen que cometan un error para ver como todos sus planes se van al traste.
                                                                                                                                        
Muy llamativo y singular es como muchas veces las imágenes se funden en un plano fijo con otra escena, ¿simbólico?, ¿audaz? El calor y la luz que se nos muestra en “El blanco en el ojo”, un aliciente más, un elemento que impregna nuestros instintos para mostrar toda nuestra atención en la ya considerada cinta de culto.

Bien es sabido de la fama de Cammell, un tipo exigente al más puro estilo “británico”, parece ser que la cinta no se concluyo como él deseaba, nos imaginamos que la distribuidora le paró los pies. Solo podemos imaginarnos como se la habría ingeniado para terminarla. Lo que no hay que imaginarse es el final de Cammell, un tiro a bocajarro acabo con su vida en el 24 de Abril de 1996 a la edad de 62 años. Corta carrera e intensa de un cineasta que como dije al principio marco un antes y un después tras la citada “Performance”. 

No hay comentarios: