FICHA TÉCNICA
Título Original: Vanishing point
Año: 1971
País: USA
Director: Richard C. Sarafian
Reparto: Newman, Cleavon Little, Dean Jagger, Paul Koslo
IMDB: PINCHAR AQUÍ
Ediciones Españolas en Vídeo: 20th Century Fox Home
Punk-tuación: 9/10
SINOPSIS
Expulsado de la policía y tras fracasar como piloto de carreras, Kowalski encuentra la felicidad con una chica surfista. Tras la muerte de ésta, ahogada en el mar, deja su actual trabajo y se embarca en una carrera hacia su fin.
FICHA TÉCNICA
Título Original: Dirty Mary, Crazy Larry
Año: 1974
País: USA
Director: John Hough
Reparto: Fonda, Susan George, Adam Roarke, Vic Morrow
IMDB: PINCHAR AQUÍ
Ediciones Españolas en Vídeo: Minatoku S.L.
Punk-tuación: 8/10
SINOPSIS
Larry, un conductor de carreras, roba en una tienda las piezas para construir el coche de sus sueños con el que ganar en el circuito. Junto a su chica, Mary, y su mecánico, emprenden una larga escapada, con la policía pisándoles los talones.
LA EXPERIENCIA
Es de tradición en el cine norteamericano las películas de carretera, pero el género de las road-movies pertenece, por derecho propio, a la segunda mitad de los 60 y a los 70. Personajes (generalmente perdedores y desheredados) a lo largo de gigantescas carreteras y autopistas, atravesando el desierto, el corazón mismo de los USA, en una nueva revisión de los viejos pioneros.
Fue el llamado Nuevo Hollywood con sus títulos fundacionales el que dio forma y espíritu a la road-movie, con las imprescindibles “Bonnie & Clyde” (1967) de Arthur Penn, y “Easy Rider. Buscando mi destino” (1969)de Dennis Hopper.
Tanto películas de autor, como títulos de los más comerciales, e incluso de pura exploitation (éstos, posiblemente, más que ninguno)llenaron las pantallas de tipos atravesando el país en busca del perdido sueño americano, en expresión clara de la angustia existencial del periodo de crisis que el país estaba viviendo. Perdedores motorizados, en coches o con gigantescos camiones, con la ley, por norma común, como el principal villano, con las drogas como compañeras, y con geniales bandas sonoras de country, folk y rock.
Cuando Robert Rodriguez y Quentin Tarantino acordaron rendir tributo a las sesiones dobles de los grindhouses de los 70 y al cine exploitation de la época, el primero decidió hacer “una de zombies”, mientras que Tarantino se decantaba por “una de coches”. Y es que las cintas “de coches” supusieron una parte importantísima de aquellas roadmovies, en títulos como “Faster, pussycat! Kill! Kill!” (1968), “Carretera asfaltada en dos direcciones” (1971), “Gone in 60 seconds” (1974)... y tantos otros. Nos decantamos hoy por una sesión doble con dos de estas maravillosas películas “de coches” de los años 70, ambas distribuidas por la 20th Century Fox.
Punto límite cero es uno de los ejemplos mejor considerados por crítica y público, y no es para menos, siendo sin duda uno de los más conseguidos. Rodada con buen pulso por Richard C. Sarafian, director habitual del medio televisivo, al que debemos otras cintas de interés como “El hombre de una tierra salvaje” (1971), o el vehículo para lucimiento de Burt Reynolds “El hombre que amó a Cat Dancing” (1973).
Protagonizada por Barry Newman, de cuyo personaje poco a poco nos van dando información de su pasado para saber qué le ha llevado a esa carrera hacia ninguna parte escapando de la policía, de la sociedad, e incluso de sí mismo. En busca de su libertad, es considerado “el último héroe americano”, “el último hombre libre”, y es apoyado y vitoreado por el pueblo, aunque se dirige a un final imposible.
Nuevamente las drogas y los camellos como personajes positivos, los agentes de la ley como fascistas que abusan de su autoridad, caso del antiguo compañero de patrulla de Kowalski, o ese joven sheriff interpretado por Paul Koslo (1).
La persecución viene a ser radiada por un DJ. Negro, apodado “Super Soul”, e interpretado por Cleavon Little (2), quien escucha ilegalmente la emisora de la policía y aconseja al conductor por dónde debe ir, además de estar pinchando constantemente canciones que forman parte esencial del film (3).
El inicio de la cinta enlaza con el final, y prácticamente toda la película es un flashback con otros flashbacks a su vez.
La indecente Mary y Larry el loco. El director John Hough, bien conocido por el aficionado al terror por títulos míticos como “Drácula y las mellizas” (1971) para la Hammer, la celebrada “La leyenda de la mansión del infierno” (1973), y ya en los 80 las nada desdeñables “Incubus” (1982) o “Escondete y tiembla” (1988), aparte de sus éxitos para la Disney y la comedia adolescente ochentera, nos brindó otro de los más destacables exponentes de la carexploitation.
En “Jackie Brown” (1996), el personaje de Bridget Fonda ve en la tele esta película, que protagoniza su padre en la vida real, Peter Fonda. Tarantino volvía a hacer un referente directo al film cuando es nombrada, al igual que “Punto límite: cero”, en “Deathproof” (2006).
Peter Fonda fue un icono en la serie B de los 60 y 70, y del principio del Nuevo Hollywood. Baste tan sólo recordarle en “Los Ángeles del Infierno” (1966), “El viaje” (1967) o “Easy Rider. Buscando mi destino” (1969). Su propia forma de ser, rebelde y anárquico, acabaría con su carrera, aunque en los últimos años ha sido recuperado por viejos fans que lo reclaman para sus películas.
Le acompaña en su odisea por las carreteras americanas, en el papel de Dirty Mary, la británica Susan George, recordada por sus incendiarios papeles en “Perros de paja” (1971) o “Mandingo” (1974).
Tras ellos, Vic Morrow, el veterano actor que de joven empezara en títulos como “Semilla de maldad” (1955) o “La pequeña tierra de Dios” (1958), que cuando veía por fin su carrera recuperada a principios de los 80, murió en un terrible accidente (4) durante el rodaje de “En los límites de la realidad” (1983), en el capítulo de John Landis.
Con papel secundario para el eterno Roddy McDowall.
El film iba a ser producido por James (padre de Jack) Nicholson, quien había abandonado la AIP, pero no pudo ser debido a su óbito.
Ambas películas terminan de forma similar. Un final triste, abrupto, desesperanzado y desesperanzador, y totalmente anárquico. Que demuestra que Ridley Scott no inventó nada nuevo en el celebrado final de “Thelma y Louise” (1991).
(1) Actor de ascendencia rusa habitual del cine norteamericano de los años 70, normalmente en papeles de villano. En su filmografía destacan títulos como “El último hombre... vivo” (1971), “América violenta” (1973), “Mr. Majestik” (1974), “El rifle y la Biblia” (1975) o “Las puertas del cielo” (1980).
(2) Actor negro recordado por sus papeles en la comedia de Mel Brooks “Sillas de montar calientes” (1974), y la blaxploitation “Un loco al volante” (1977), de Michael Schultz, acompañando a Richard Pryor, Pam Grier y Beau Bridges.
(3) Propio de su momento, otros filmes usaron esta fórmula del DJ en, por ejemplo, “Car Wash. Un mundo aparte” (1976) de Michael Schultz. Quentin Tarantino daría importancia a una emisora y a un DJ (no por casualidad de super música de los 70) en su ópera prima “Reservoir Dogs” (1992).
(4) Durante la filmación, Morrow perdió literalmente la cabeza, cortada por la hélice de un helicóptero. Padre de la también actriz Jennifer Jason Leigh, con la que no se hablaba.
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